En muchos centros industriales existen distintos niveles que deben superarse para poder trasladar mercancías de un sitio a otro. Las plataformas elevadoras permiten resolver esta necesidad y se integran en los procesos de producción de cada una de las instalaciones.
La ventaja de este tipo de elevadores industriales es que se diseñan a medida, y se adaptan para poder dar solución a las necesidades de logística.
Los distintos modelos de plataformas elevadoras industriales permiten cargar mercancías con pesos máximos que oscilan desde los 80 Kg. hasta los 10.000 Kg. Por un lado las plataformas para minicargas permiten desplazar pesos máximos de hasta 80 Kg. y se utilizan en restauración, comercios o naves industriales que trabajan con pesos livianos. En el otro extremo existen plataformas industriales que pueden desplazar hasta 10.000 Kg. y que se utilizan como montacoches o para maquinaria pesada.
Las plataformas elevadoras industriales están fabricadas con materiales resistentes pensados para soportar las cargas y los esfuerzos derivados de esta actividad. Son de fácil y rápida instalación, y su tracción se debe a un equipo hidráulico, que permite un consumo energético mínimo.
Las medidas de seguridad de las plataformas elevadoras industriales incorporan la última tecnología como los sistemas de renivelación automática, pulsador de paro de emergencia, temporizador de seguridad final de recorrido, sistemas paracaídas y de frenado de emergencia, y suelos de chapa antideslizante totalmente fiables y seguros.
Las plataformas elevadoras industriales pueden instalarse tanto en el interior de una nave como en su exterior, mediante estructura autoportante. Además son fáciles e intuitivas de manejar por cualquier operario. Se trata de un dispositivo práctico, compacto y silencioso que facilita el transporte de mercancías pesadas en el día a día de una instalación industrial.
